Menos mal que se nadar…reina el silencio en este oscuro lugar… parecía que estaba amainando pero todavía no, y me siento triste, sola, vacía y abandonada como los objetos de mis fotografías (las #cervezascallejeras)
¿Que me gustaría?, no tener estos bajones, aún no los entiendo del todo. Ojalá los entendiera…Pero se adonde no quiero volver, aunque a veces no sepa adonde voy, ni adonde quiero ir.
Sé que me volveré a ilusionar, volveré a reír y sonreír y volveré a compartir sin esperar nada…, pero es que aunque parezca mentira se me olvida que después de una subida viene una bajada…
E ironías del destino, mientras, escribo y lloro suena «para que tu no llores» de Antonio Carmona