Sweet dreams


Hace casi dos años que dejé de fumar, ahora llevo ocho meses sin hacerlo, ósea que no lo he conseguido a la primera 😉 estoy en ello. 

Las dos últimas semanas, que curiosamente coincide con que estoy de vacaciones tengo muchas ganas de fumar, hacía tiempo que no tenía tantas…

Anoche soñé que fumaba, no que había vuelto, no que tuviera remordimientos por volver, soñé que fumaba, que nunca había dejado de hacerlo. En el sueño estaba sorprendida pues me daba cuenta que ese mismo día, antes del mediodía sólo me había fumado un  cigarro, y los dias anteriores también había fumado poquito, estaba sorprendida y contenta, vislumbré en el sueño lo que es una realidad. 

Estuve leyendo acerca de los sueños, supongo que algo tendrá que ver.

 Ha sido un buen sueño.

Seguiré mi camino liberándome de mis adicciones, seguiré hacia mi territorio 0’0

Un abrazo 🤗 

Y no para de llover… 

Menos mal que se nadar…reina el silencio en este oscuro lugar…  parecía que estaba amainando pero todavía no, y me siento triste, sola, vacía y abandonada como los objetos de mis fotografías (las #cervezascallejeras) 

¿Que me gustaría?, no tener estos bajones, aún no los entiendo del todo. Ojalá los entendiera…Pero se adonde no quiero volver, aunque a veces no sepa adonde voy, ni adonde quiero ir.

Sé que me volveré a ilusionar, volveré a reír y sonreír y volveré a compartir sin esperar nada…, pero es que aunque parezca mentira se me olvida que después de una subida  viene una bajada…

E ironías del destino, mientras, escribo y lloro suena «para que tu no llores» de Antonio Carmona

Cuando todo se vuelve gris…


Cuando todo se vuelve gris, cuando parece que nunca volverá a salir el sol en tu corazón, cuando solo tienes ganas de llorar…cuando estás cansada y no le encuentras el sentido a nada…

Y sin embargo tienes que fingir, porque ese desánimo es contagioso y no quieres ser la portadora de semejante mierda… vas aguantando, vas viéndolo venir, no sabes a qué o a quién aferrarte, sabes que pasará, porque ha sido siempre así, al menos de momento…

Y poco a poco parece que va remitiendo, poco a poco, yo no tengo mucha paciencia y me desespero…

Es sobre todo un proceso interior mío, escucharme, detectar lo que me pasa, generalmente es una acumulación de cosas en apariencia pequeñas… es:

http://vivirsinbeber.com/la-gota-que-colma-el-vaso/
Y entonces me acuerdo que puedo volar, pero que estoy aprendiendo… 

Y recuerdo que ya caí en las adicciones como forma de huída, y que de eso se trata de aprender a afrontar y no huir. 

Y que si quiero seguir con mi decisión tengo que aprender más y más, en medio de un mundo que a veces no comprendo y no me comprende… 

Me acuerdo de muchas cosas que he escrito en estos últimos tiempos y me van bien, ahora entiendo lo de compararlos con hojas de ruta o mapas…lo son con ciertos cambios. 

También recuerdo este texto que me encantó y ahora me viene como anillo al dedo:

NO TE ABANDONES 

Antes de que te des cuenta, ya te abandonaste. Comiste algo que no debías; diste más a los demás que a ti mismo; no le diste tiempo a tu sanación y tu silencio; hiciste algo que en verdad no sentías; no seguiste a tu corazón; no hiciste ejercicio físico; dormiste menos de lo que tu cuerpo te pedía; trabajaste más de lo necesario ignorando el límite de tu bienestar; entregaste tu poder al sistema; le permitiste a tu mente saltar al pasado o al futuro; te perdiste en la superficialidad. Antes de que te des cuenta, perdiste el contacto con tu dichosa alma. Entonces vuelve, no te abandones más. Ámate profundamente; ámate con locura. Esta es la clave de la felicidad; estar siempre de tu lado, siempre escuchándote, siempre respetándote, siempre cuidándote, siempre dándote todo lo mejor, todo lo que sabes que necesitas. 

No te abandones. 

Lic. Fernán Makarof

Si no encuentras el camino…

Si no encuentras el camino, sigue la flecha…

Que fácil, sin embargo ¿qué flecha? Hay tantos caminos, en cada cruce hay como mínimo dos bifurcaciones. 

Y si hubiera girado hacia el otro lado?  ¿Qué habría pasado? ¿Habrá otra realidad paralela con las otras decisiones que desechamos? 

A veces pierdo el camino…,sé que es pasajero, que lo volveré a encontrar, pero el momento es dramático…, luego es como si se hiciera de día y todo fuera obvio.  

Y mientras escribo suena «plora i riu» de Oques grasses.

Enganches


Hay diferentes tipos de enganches, pero no quiero hablar de ninguno de los de la imagen 😉 

A veces magnificamos algo o a alguien, o la imagen que nos hacemos de ese alguien, que sé yo… y  creamos una especie de adicción o enganche que no es racional, pero está ahí, no es bueno para ninguna de las partes, no es algo material, pero no por no ser material es menos sentido. 

Nos dá la sensación que no podemos pasar sin esa persona o cosa, pero sabemos que no es así, cuando la tenemos delante desaparece la sensación, pues en realidad es algo que está en nuestra mente y el presente suele espantar esos cacaos mentales…

Buf, que lío, estoy hablando en plural pero en realidad debería hacerlo en primera persona del singular.

Esto me pasa con personas «tóxicas» (lo pongo entre comillas porque no tengo claro si realmente existen personas así) y con personas que me hacen ser mejor persona a mí misma. Estoy aprendiendo a gestionarme en esto, y si bien racionalmente lo entiendo, no puedo gestionarlo solo desde esa racionalidad, tengo que echar mano del corazón para desengancharme, pues el amor es libre y no entiende de demasiadas ataduras.

Siempre me sirve hacer lo que me gustaría que me hicieran, y no me gustaría que nadie sintiera dependencia hacia mí. 

Me repito a mí misma «Equilibrio» no puede ser todo o nada…

En fín, mejor me voy a hacer algo físico que no me deje darle vueltas al coco, al menos antes de que me estalle. 

Esto de la sobriedad y madurar, no es tan facil…, pero me encanta ir dándome cuenta de mis asuntos sin resolver. 

Leí en algún sitio que igual que un paciente puede desarrollar una especie de dependencia hacia su médico al considerarlo su salvador, así mismo también se puede desarrollar con cualquier persona que te haya ayudado significativamente. 

Ya lo escribí en otro sitio, la basura acumulada en tres decadas no se puede limpiar en dos años, pero ahí vamos! 

Enganches y desenganches…

Apego y amor…

Adicción y libertad…

Recuerdos…


Anoche no podía dormir 😴…son las fiestas de mi barrio y había mucho ruido.

Estuve entretenida leyendo, y más tarde viendo las fotos de la galería de mi móvil. 

Es una pasada, el móvil ya te las ordena por fecha. Las fotografías que vas haciendo y que vas recibiendo te van contando toda una historia, me entretuvo verlas, me hizo pensar, valorar, recordar, darme cuenta de cosas que sin la perspectiva del tiempo no había sido consciente. 

Las fotos me fueron contando quien había estado a mi lado, cual era mi estado de ánimo, lo que había hecho y donde había estado. 

Las cosas ¿son como las vieron los ojos?, ¿son como las recuerda la memoria?, no son siempre igual, el mismo suceso con el tiempo lo vemos diferente. 

Llevo dos años sin beber alcohol ni drogarme, el detonante definitivo ocurrió el 21 del 5, pero viendo las fotos y reconstruyendo mi propia historia, vi que habían pasado muchas cosas antes para que ese día yo estuviera preparada para tomar esa decisión.

No he hecho ningún descubrimiento súper importante, y probablemente visto desde fuera sean cosas obvias, pero con nosotros mismos no solemos ser objetivos, al menos yo. 

Me hace pensar, sobre todo que vivir sin drogas, te hace estar más presente en tú vida, ser más consciente de lo que pasa a tu alrededor y que conocernos a nosotros mismos, madurar, y ser responsables de nuestras acciones es incompatible con las drogas. Al menos es como lo veo ahora. 

Que todo tiene tiempos y procesos por los que tenemos que pasar, que cada uno tenemos nuestro propio ritmo de aprendizaje y que la vida es «vella» siempre, aún con errores.